Los abogados penalistas representan a personas que enfrentan cargos en tribunales estatales, federales o de apelación. Estos abogados pueden participar en audiencias de libertad condicional, fianzas, juicios e incluso apelaciones posteriores a la condena.
Los abogados penalistas tienen muchas responsabilidades para garantizar que sus clientes reciban un trato justo de acuerdo con la ley. Deben conocer la ley a fondo y saber cuándo y cómo necesitan investigar detalles sobre la ley. Para construir un caso, deben ser buenos investigadores y entrevistadores, así como estrategas inteligentes.
Los abogados penalistas también pueden negociar o pedir cargos menores con la fiscalía, por lo que deben ser buenos negociadores. También son responsables de presentar mociones, incluso para desestimar o suprimir. Lo más importante es que están allí para ser defensores de sus clientes en lo que suele ser una situación muy estresante.
Un buen abogado penal sabe cómo argumentar tanto oralmente como en papel. Es su responsabilidad construir un caso completo basado en evidencia y seguir la ley de cerca.